Música de las montañas
Entrevista a Federico Randall aka The Peronists
En la bisagra del año (3 de julio 2020), fue el estreno de “Migración Inka”, primera colaboración de The Peronists para Folcore Records, y el release 121 del sello. Un EP de 4 temas con suaves aires de cerro, reminiscencias del altiplano, un feat junto a Morita Vargas y el magnetismo de un sonido que invita a cerrar los ojos para despegar los pies de la tierra.
“El disco comenzó a producirse durante mi primer invierno viviendo en Andorra (a finales de 2019). Luego vino el marzo fatal del primer confinamiento donde empecé a terminarlo”, recuerda Federico desde Organyá, en las afueras de Lérida en Cataluña, sobre los primeros pasos de su última producción. Allí decidió recalar este dj y productor argentino, que dejó su Tucumán natal hace casi veinte años para recorrer el mundo con su fusión de música electrónica con instrumentación folklórica y autóctona. Su espíritu nómade no faltó a lo largo de todo este último proceso creativo: “El tema Timing recuerdo haberlo empezado en plena pandemia cuando no se podía salir de “casa”. Digo así porque estaba parando en lo de un amigo ya que el camping donde vivía había sacado a todos al principio de esta mierda. Luego Shasta y El Recurso los hice en Coll de Nargò antes de diciembre, y Selvático en Barcelona pre-lockdown”.
—¿Te consideras un migrante dado que estás viviendo fuera de tu país hace ya varios años? ¿Cómo se traduce esa vivencia personal a tu música?
—Es muy raro porque ya tengo un cotidiano bien acostumbrado a mi sitio aquí en Organyà, pero a la vez cargo con mis raíces y mi música. Al mismo tiempo como vivo rodeado de montañas tampoco es tan diferente a Tucumán (en el norte de Argentina), entonces es normal para mí, pero también entiendo que no es un tipo de música que se podría esperar de alguien nacido aquí. ¡Yo pienso igual que hago música de las montañas y ya está! (risas).
—¿Cuál fue la inspiración central de “Migración Inka”?
—Fue en gran parte la mudanza y la nueva vida en Catalunya, estar mucho tiempo en el aire y vivir en una caravana, entre varias cosas nuevas.
—¿Qué vibe busca transmitir cada track?
—Son diferentes momentos de liberación de energías personales. Está el deseo de experimentar viajes, de volar en lugares como Shasta (volcán californiano místico), o de tener a mano un as como El Recurso o también de bailar como en Selvático. Con Timing el rollo era el de pasear en auto por una gran ciudad mientras sucedía el primer confinamiento.
—¿Cómo fue trabajar en colaboración con Morita Vargas para “Selvático”?
—Morita es una virtuosa del flash, en principio ella me dijo que estaría bueno que haga un track así y así. Una noche, estando en Barcelona, lo empecé y se lo envié. Pasó un tiempo y me mandó todo cocinado. Tardamos un tiempo pero el resultado final me gusta mucho, además la quiero y es mi amiga. Ahora tengo otro buen recuerdo con ella.
—¿El concepto para la tapa del disco lo realizaron en conjunto con Cuore (@cuorediseno.arg) o fue una propuesta de él? ¿Qué importancia tiene el arte de tapa en tus producciones?
—Fue algo que desarrolló Cuore por él mismo, nos conocemos hace más de 20 años, así que lo dejé todo en sus manos para que esté libre y contento en su búsqueda. Confiaba plenamente y así salió la tapa. Me sorprendió lo que envió ya que se salió un poco de su estilo personal, adaptándose al estilo de la música y basándose en el arte de indígenas autóctonos pre incaicos de Tucumán y eso estuvo muy bien también.
The Peronists figura dentro del puñado de artistas que pateó el tablero musical local (en Argentina) y descolocó a muchos dentro y fuera de la escena en los albores del nuevo milenio. Primero fue el ciclo Festicumex (2003) que puso la piedra fundacional y luego surgió la cofradía de músicos, productores, artistas visuales, bailarines y demás fauna nocturna detrás de las fiestas Zizek (2006 en adelante), quienes tomaron la posta para crear el caldo de mestizaje sonoro que desembarcó en los line ups de los festivales internacionales en los últimos quince años. Toda esa etapa creativa acompañando y siendo parte del crecimiento exponencial de la movida tuvo un subidón en 2013 cuando fue convocado para formar parte de la prestigiosa Red Bull Music Academy en Nueva York.
—¿Cuál es tu mirada hacia atrás de la escena y cómo la ves en la actualidad?
—Actualmente todo ha evolucionado un montón y hay grandes artistas en esta movida, algo que se deseaba en ese entonces, pero que no se sabía cómo iba a ser. Y pensando hacia atrás diría que estuvo buenísimo llevar coplas, chacareras, candombe y cumbia a Niceto Club (discoteca y espacio musical referente en Buenos Aires desde 1998 / @nicetoclub) en la época de las fiestas de Zizek (uno de los epicentro fundacionales de la escena de la cumbia digital en Argentina a cargo del sello @zzkrecords). Estuvo bacán esa convivencia donde iban todos (mcs, productores, etc); ahora volvimos a segmentarnos.
—Y en esa línea retrospectiva, ¿qué importancia tuvo la colaboración con la Red Bull Music Academy? ¿Qué recuerdo permanece de esa experiencia?
—Me cambió la vida y cada año que pasa me doy más cuenta que fue una experiencia única e irrepetible, que tuve mucha suerte de quedar seleccionado para vivirla. Me costó unos años aprovechar bien esas enseñanzas. Estar en grupo con seres tan particulares como los que asistieron, siendo alumnos jóvenes con potencial, exponiéndose a la realidad de una carrera y forma de vida que se suele idealizar y desconocer; aún me motivo con aquella experiencia de la RBMA. Me suelo decir que si estuve ahí es por algo y que algún día, si tengo buena conducta y disciplina, quizá pueda estar del otro lado.
—Pasaron 12 años del primer compilado de ZZK Sound, Vol 1 donde aparece el track instrumental “Cumbión”. Ese disco fue punta de lanza de la explosión de la cumbia digital, ¿qué recuerdas de esa época y de esa irrupción en la escena musical Argentina primero, y de cómo se esparció posteriormente por el mundo?
—De ese tiempo tengo muy buenos recuerdos porque todo era muy libre, en cambio ahora ya hay un universo bien estructurado sobre el género y sus mutaciones y géneros satelitales. Lo interesante de ese momento era la escasez de temas así, entonces cada vez que salía algo o un nuevo artista era como uhh mirá esto. Tampoco había presiones ni estándares sobre cómo debían hacerse las cosas, o por lo menos así lo viví, con mucha alegría cuando aparecían artistas nuevos. ¡Estamos hablando de cuando Myspace era la posta, antes de Soundcloud! Había mucha libertad y el público era muy receptivo a esas experimentaciones y se armaba una onda increíble, donde nadie estaba shazameando, ni haciendo historias de IG (risas). Esa buena onda me la llevaba a casa para producir durante la semana, y aunque vivía en La Plata (a 60 km de distancia), iba seguido a Niceto Club, porque había una terrible buena onda y un backstage que se extraña.
Federico tiene otra gran pasión además de la música; el parapente. “La letra de Selvático invita mucho a volar. Realmente volar seguido te cambia y te llena de un humor especial y de vida. Sin dudas me influencia mucho, porque son dos actividades parecidas aunque a priori no parezca”, dice a la distancia, desde este pequeño pueblo perdido a dos horas de Barcelona, que según él es “una especie de Hawái del parapente”. Mientras intenta retomar los vuelos, puertas adentro se remonta el siguiente proyecto que ya tiene nombre y espera fecha y pista para aterrizar en todas las plataformas.
—¿Nos puedes adelantar algo de “Rural Beats”, tu próxima producción? ¿En qué etapa está y cuándo crees que saldrá? ¿Cuál será el espíritu musical principal?
—Será un Ep (entre 5 y 7 temas) que está en fase de mezclas y ediciones finales. No sé cuando saldrá, calculo que cuando Folcore vea que es conveniente seguramente. “Rural Beats”, como el título sugiere, tendrá un toque de hip hop beats, pero en mi onda guitarrera paisana y andina. También hay algo de cumbia y se podría decir que es una continuación de “Migración Inka”, pero hacia sentimientos diferentes. Este disco es producido íntegramente en pandemia, con sus limitaciones, minimalismo e incertidumbres. Creo que se siente más la crudeza y el swag de la vida que nos tocó este año. Sin dudas será un buen escape para la gente que gusta de esta música. Tengo mucha ilusión porque me pude expresar haciéndolo y me pone contento poner esos sonidos folklóricos juntos con los beats. ¡Me lo he pasado bien ideando en bastante soledad, a ver como lo escuchan ustedes! (risas)
—¿Qué músicos-productores nuevos oyes y con quiénes te gustaría colaborar?
—Me gusta mucho Ynfynyt Scroll (@ynfynytscroll), Dinamarca (@dinamarca117), Zora Jones (@misszorajones), Morita Vargas (@moritavargas), y colaborar me gustaría con todos y más.
—¿Cuál es tu balance de este año apocalíptico?
—Fue durísimo, a nivel personal me pude refugiar un montón en la música y eso fue muy positivo, pero deseo para todos un cambio y una mejoría ya que a nivel global por fuera de la pandemia se están viviendo muchas cosas negativas.
Entrevista: Diego Altabás
Single adelanto exclusivo Bandcamp
Timing (Vocal Mix) ft.Yodashe by The Peronists
Diego Altabás
Diego Altabás (Argentina, 1977) es periodista, productor, viajero y malabarista. Escribió para reconocidos medios gráficos como Rolling Stone, THC, La Mano, Picadero, entre otros. Durante diez años fue parte del staff de la revista Newton Las Pelotas!, una publicación mítica en el sótano de la cultura editorial, a comienzos de la era 2.0. Hace 18 años co-dirige la productora artística Electroarte (@electroarte), con la que trabaja produciendo y dirigiendo shows performáticos en eventos, fiestas y festivales. Fue co-creador de Día Libre, Encuentro de Arte y Deporte Urbano Freestyle (6 ediciones / 2009-2011). Forma parte hace 10 años de LigLab (@liglab), colectivo de light painting y fotoperformance. En 2017 editó su libro Mexicodelia, una crónica de viaje autobiográfica, bitácora psicodélica por la cultura de la noche y las raves mexicanas en los inicios del 2000.
Diego Altabás
Diego Altabás (Argentina, 1977) is a journalist, producer, traveller and juggler. He has written for renowned graphic media such as Rolling Stone, THC, La Mano, Picadero, among others. For ten years he was part of the staff of Newton Las Pelotas! magazine, a mythical publication in the basement of the publishing culture, at the beginning of the 2.0 era. For 18 years he has co-directed the artistic production company Electroarte (@electroarte), with which he works producing and directing performance shows at events, parties and festivals. He was co-creator of Día Libre, a Freestyle Urban Art and Sport Meeting (6 editions / 2009-2011). He has been part of LigLab (@liglab), a light painting and photoperformance collective for 10 years. In 2017 he published his book Mexicodelia, an autobiographical travel chronicle, a psychedelic logbook through the night culture and Mexican raves in the early 2000s.